sábado, 17 de octubre de 2009

Verso de ida sin vuelta.

"Y no lo entiendo, fue tan efímero:
el caminar de tu dedo en mi espalda
dibujando un corazón.
Y pido al cielo, que sepa comprender
estos arranques de celos que me entran
si yo no te vuelvo a ver"
Melendi.

Se viene un cambio y no es contigo;
una noche fría y un cielo estrellado
mis versos estrujados
dañados
insulsos
se viene un mañana incierto y desigual
tu ausencia y un martirio constante.

Ya no me importa tu felicidad
tú mataste la mía
la llenaste de malas palabras
de malos rencores
de dolores ajenos
y así te marchaste;
suave y punzante
te marchaste
sin calma
sin risa
sin nada.

Se viene un punto final afilado
el corte de mis sueños
se viene un cambio
tan monstruoso
tan bueno
se viene un cambio
y me obsesiona
me obsesiona el hoy
el mañana
el quizás
la vida sin ti
que ya no es vida.

lunes, 12 de octubre de 2009

Verso de adiós.

Si me perdí errante de camino
en una nebulosa literaria y menguante,
si me ahogué en el mar libre de abrazo
si mi pecho se desgarra
si mis dedos por primera vez
se quedaron sin drásticas palabras.

Ya perdimos ambos, huracán;
vientos
ganas
y cielo.
Perdimos el deseo de soledad acribillada
y yo me marcho con mi guerilla
y yo ya te dejo en paz.

Si me perdí errante de camino;
yo jamás supe de amor.

sábado, 3 de octubre de 2009

De ti.

De tu rostro se viste la miseria
la desigualdad de dos pobres y piadosos;
de tu rostro viste el verso apasionado
que nunca veré en tu boca
que nunca sentiré de tus labios
tan llenos de rencor
de astillas de madera
tan
tan llenos de nada.

De tu rostro se viste este dolor
esta vida de hormonas y encierro;
esas preguntas repetidas y perjuradas
el malnacido juez de mi destino
tan enterrado te veo
tanta tierra maldecida
tan enterrada me siento.

De tu rostro se viste aquel todo
tal vez perdí mi cuenta y mi espacio
tal vez olvidé medirme en amor
y así quedamos tan vacíos y solos
tú tan perdido en los vicios
yo tan ausente de gracia y maldigo
maldigo la espera vana
el cigarrillo en tus labios
maldigo al borracho del bar
que te aguanta las penas que yo no puedo.

Que simplemente no puedo.